Trato de pensar cuál serÃa la esencia del proyecto. Quisiera poder plasmar tal cual como lo imagino, pero solo intentaré describirlo de una manera simple y con pocas palabras, con un lenguaje un poco más amigable y no tan técnico-arquitectónico.
La unidad vecinal en el marÃtimo son casitas que forman calles para estar, y para encontrarse. Estas casas buscan comunicarse con el exterior, y para ello, juegan con formas quebradizas que crean lugares: pequeños jardines, terrazas, espacios para colocar materos, bicis, juguetes, herramientas, espacios para saludar o para sentarse a conversar, para cafés compartidos, juegos y para sentir el sol. Estos lugares intentan ser lo rico del proyecto, pues son el tesoro que será cuidado por las personas.
Entonces podemos decir que se parte del final: de pensar en lo que queremos que ocurra después de la arquitectura. Y lo que ocurre es que las personas lo habitan, lo hacen suyo y disfrutan del estar y el compartir.